Antes de iniciar este post, he de decir que hasta relativamente poco, el Multiforo Cultural Alicia era un lugar un tanto mítico para mí; ya que además de algunas referencias de algunos amigos míos que habían tocado ahí y de las referencias en algunas de las pocas revistas de rock en México, poco sabía del lugar. A invitación de un buen amigo mío, asistí a una tocada de San Pascualito Rey en ese foro y posteriormente, ya por mi cuenta, con mi marido he asistido unas cuatro o cinco veces más a ver a las Ultrasónicas, Lost Acapulco y alguna otra banda más. El lugar, que se encuentra sobre la avenida Cuauhtémoc, casi esquina con Colima, es por derecho propio, el único lugar en el Distrito Federal que por sus características, filosofía de operación y sobre todo, por su ambiente que se puede ostentar como la auténtica cuna de la escena cultural subterránea de México.
¿Qué es el Alicia?
El Alicia es el lugar donde se dan la mano el México de los seres reales, esos que viven la cruda realidad de vivir en un país cada vez más cercano al caos y egoísta y que en el Alicia encuentran, bajo la comunión de la música, la identificación de ser parte de algo que vale la pena porque es honesto, real y sobre todo, que permite asumirlo como parte de uno.
El Alicia no es para niños bonitos que esperan lugares amplios, a la moda y llenos de gente bonita como en antro de la Condesa o Polanco. En el Alicia el sudor escurre (literalmente) del techo del lugar y vibra con la vitalidad de quienes saben lo que es la vida en la calle.
En el Alicia la experiencia es la comunión total del público y su grupo favorito. Es reconocer el mérito artístico no por cuantas veces has aparecido en la tele, sino porque tus canciones se le han tatuado a la gente común que te ve en el escenario.
El Alicia es más que un lugar para ver tocar a grupos que no aparecen en la TV y que sin embargo, pueden llenar el lugar sin necesidad de los medios. El Alicia es la expresión sobreviviente del arte que sigue siendo subversivo en su forma y contenido y que se mezcla en la cultura popular, esa que realmente emana de las calles y que se transforma de las experiencias cotidianas e individuales para convertirse en símbolos unificadores.
El Alicia está en la frontera justa del México de a de veras, ese que vive en las colonias y barrios populares de la capital, como la Doctores que está justo cruzando la avenida y el México de la supuesta cultura popular “bonita y trendy” que coexiste hacia dentro de la Roma y la Condesa, esa donde para los niños bonitos, ser naco es “cool” y curiosamente, de vez en vez, bajan al Alicia para sentirse underground.
El Alicia (como se le conoce comúnmente) cumple este mes de noviembre 15 años de vida y oportunamente, se ha editado en nuestro país, bajo el sello de la editorial “Edixiones Alicia” el libro “Alicia en el espejo: Historias del Multiforo Cultural Alicia” de María Teresa Lopez Flamarique. A lo largo de 170 páginas, la autora, a través de la narración de las memorias, pensamientos, deseos y vivencias de “Alicia”, un personaje (¿ficticio?) que es una asidua asistente al Multiforo, nos cuenta la génesis de este lugar que solo podría existir en un lugar como el Distrito Federal y más aún, en la Colonia Roma.
El tratamiento que Lopez le da a su trabajo, mezclando la crónica con entrevistas y un trabajo periodístico de investigación hacen amena la lectura de este libro y adicionalmente, permite al lector adentrarse dentro del mundo del Alicia, donde ideologías aparte, se le da a los creadores el espacio y el respeto por su trabajo que merecen al hacerlos participes no de un esquema de negocio musical típico, sino de una experiencia de autoaprendizaje y cooperación que difícilmente se ve en la industria musical en nuestro país y no se diga de las compañías disqueras.
Acompañando al libro se incluye un sampler de “Grabaxiones Alicia” con un compilado de las diversas bandas que forman parte del sello y que de igual manera, han pisado el Alicia; además de memorabilia alusiva al foro.
El libro es pues lectura obligada para todos aquellos que piensan que el rockcito en México nunca crecerá porque está copado por grupitos “indies” que solo les interesa ser copias mal hechas de grupos gringos (saludos Rey Pila!) o que el éxito solo se puede dar si eres cuate del Rulo o cualquier otro programador o locutor de Reactor; ya que en si, más que un documento testimonial, es un perfecto manual de autogestión y sobre todo, una lección de que a pesar de todo, aun hay gente en el país que cree no en el dinero, sino en las personas.
Personalmente, el libro me ha dado una visión más allá de esa noción un tanto errada de que el Alicia es como el hoy extinto CBGB de Nueva York. Ya sabemos todos como el CBGB terminó y bueno! El Alicia, aun con todo lo que le ha tocado pasar, se mantiene fiel a sus ideales y propuesta.
Feliz Cumpleaños Alicia!
¿Qué es el Alicia?
El Alicia es el lugar donde se dan la mano el México de los seres reales, esos que viven la cruda realidad de vivir en un país cada vez más cercano al caos y egoísta y que en el Alicia encuentran, bajo la comunión de la música, la identificación de ser parte de algo que vale la pena porque es honesto, real y sobre todo, que permite asumirlo como parte de uno.
El Alicia no es para niños bonitos que esperan lugares amplios, a la moda y llenos de gente bonita como en antro de la Condesa o Polanco. En el Alicia el sudor escurre (literalmente) del techo del lugar y vibra con la vitalidad de quienes saben lo que es la vida en la calle.
En el Alicia la experiencia es la comunión total del público y su grupo favorito. Es reconocer el mérito artístico no por cuantas veces has aparecido en la tele, sino porque tus canciones se le han tatuado a la gente común que te ve en el escenario.
El Alicia es más que un lugar para ver tocar a grupos que no aparecen en la TV y que sin embargo, pueden llenar el lugar sin necesidad de los medios. El Alicia es la expresión sobreviviente del arte que sigue siendo subversivo en su forma y contenido y que se mezcla en la cultura popular, esa que realmente emana de las calles y que se transforma de las experiencias cotidianas e individuales para convertirse en símbolos unificadores.
El Alicia está en la frontera justa del México de a de veras, ese que vive en las colonias y barrios populares de la capital, como la Doctores que está justo cruzando la avenida y el México de la supuesta cultura popular “bonita y trendy” que coexiste hacia dentro de la Roma y la Condesa, esa donde para los niños bonitos, ser naco es “cool” y curiosamente, de vez en vez, bajan al Alicia para sentirse underground.
El Alicia (como se le conoce comúnmente) cumple este mes de noviembre 15 años de vida y oportunamente, se ha editado en nuestro país, bajo el sello de la editorial “Edixiones Alicia” el libro “Alicia en el espejo: Historias del Multiforo Cultural Alicia” de María Teresa Lopez Flamarique. A lo largo de 170 páginas, la autora, a través de la narración de las memorias, pensamientos, deseos y vivencias de “Alicia”, un personaje (¿ficticio?) que es una asidua asistente al Multiforo, nos cuenta la génesis de este lugar que solo podría existir en un lugar como el Distrito Federal y más aún, en la Colonia Roma.
El tratamiento que Lopez le da a su trabajo, mezclando la crónica con entrevistas y un trabajo periodístico de investigación hacen amena la lectura de este libro y adicionalmente, permite al lector adentrarse dentro del mundo del Alicia, donde ideologías aparte, se le da a los creadores el espacio y el respeto por su trabajo que merecen al hacerlos participes no de un esquema de negocio musical típico, sino de una experiencia de autoaprendizaje y cooperación que difícilmente se ve en la industria musical en nuestro país y no se diga de las compañías disqueras.
Acompañando al libro se incluye un sampler de “Grabaxiones Alicia” con un compilado de las diversas bandas que forman parte del sello y que de igual manera, han pisado el Alicia; además de memorabilia alusiva al foro.
El libro es pues lectura obligada para todos aquellos que piensan que el rockcito en México nunca crecerá porque está copado por grupitos “indies” que solo les interesa ser copias mal hechas de grupos gringos (saludos Rey Pila!) o que el éxito solo se puede dar si eres cuate del Rulo o cualquier otro programador o locutor de Reactor; ya que en si, más que un documento testimonial, es un perfecto manual de autogestión y sobre todo, una lección de que a pesar de todo, aun hay gente en el país que cree no en el dinero, sino en las personas.
Personalmente, el libro me ha dado una visión más allá de esa noción un tanto errada de que el Alicia es como el hoy extinto CBGB de Nueva York. Ya sabemos todos como el CBGB terminó y bueno! El Alicia, aun con todo lo que le ha tocado pasar, se mantiene fiel a sus ideales y propuesta.
Feliz Cumpleaños Alicia!
Hoy buscando la imagen del libro me topé con tu nota y me parece bastante bueno que el contenido se esté divulgando cada vez más, es sin duda un texto que aguarda parte de la cultura juvenil defeña desde hace ya buen rato.
ResponderEliminarMe encontré con el libro hace algunos meses y esta la nota también lista en el blog.
Enhorabuena por compartirla!